Ricardo Contreras es un exitoso y joven empresario, o al menos así lo cree, sumido en la rutina y las exigencias de la sociedad convencional. Pero su vida está a punto de dar un giro a partir de eventos casi fortuitos, encuentros inesperados y extrañas coincidencias a lo largo de un día que parecía ser uno más.
Al final del día, habrá cambiado su manera de ver el mundo, pero sobre todo, habrá dado el primer paso en un viaje que lo llevará a descubrirse a sí mismo.
Con un relato ágil y descomplicado, sin afanes moralistas, el autor nos lleva de la mano junto al protagonista a través de breves reflexiones sobre la vida misma, las relaciones personales y las prioridades que nos impone la cotidianidad. A medida que el texto avanza, nos encontramos reflejados en los personajes y en sus vivencias, nos ponemos en su lugar y comprendemos que, como se plantea al inicio del libro, uno encuentra lo que busca cuando menos lo espera y en los lugares más insospechados.
Esta es, en definitiva, una obra cuya lectura enriquecerá el espíritu de quienes decidan embarcarse en la travesía de leerla.